El fútbol americano es el único deporte que sigo regularmente, aunque no lo menciono mucho en el Bló porque para eso mejor participo ocasionalmente en foros especializados, además de que no es un deporte especialmente popular en México y latinoamérica. La estrategia, la inteligencia y la táctica son parte esencial de cada juego, por lo que me resulta tan atractivo.
El equipo de mis amores desde que era chamaco son los 49's de San Francisco, cuya casa es el legendario Candlestick Park o Parque del Candelero cuya inauguración data de 1960. Esta noche, los 49's juegan su último partido de temporada regular en "su casa" ya que a partir de la temporada 2014 tendrán un nuevo estadio (que creo se llamará Levi's o algo así).
Cronistas y periodistas deportivos consideraban al Candlestick como un estadio "feo", pero en este campo se quedarán las memorias de aquellas idílicas tardes de domingo en las que el quarterback Joe Montana (considerado como el mejor de todos los tiempos) guió al equipo de la bahía a incontables victorias bajo la mirada del también legendario entrenador Bill Walsh (q. e. p. d.) durante los dorados años 80's.
También en este lugar el receptor Jerry Rice se cansó de implantar records de la liga, muchos de los cuales permanecen vigentes a la fecha. El Candlestick vivió, así mismo, las hazañas de jugadorazos como John Brodie, Ronnie Lott, Roger Craig, Steve Young, o más recientemente Aldon Smith o Frank Gore entre muchísimos otros. Vaya, hasta los insufribles Deion Sanders y Terrel Owens brillaron con el equipo californiano (aunque después perdieron el juicio y el buen gusto y se fueron a jugar para los vaqueruchos de Dallas).
El estadio también fue durante muchos años la casa de los Gigantes de San Francisco del béisbol de las grandes ligas hasta que en 1999 se mudaron a un nuevo parque, por lo que durante muchos años el staff del estadio tenía que realizar la titánica y ardua labor de remover o ajustar las gradas y preparar el campo según el evento que se tratara.
No todo fueron deportes en el Candelero. De hecho, los Beatles dieron aquí su último gran concierto en Estados Unidos (esto en 1966).
Albergó una visita papal de Karol Wojtyla en 1987 y sobrevivió al terremoto de 1989, acontecido en medio de un partido de Serie Mundial.
Pero para el esto escribe, este lugar siempre será recordado por La Atrapada (The Catch). Considerada como una de las más grandes jugadas del fútbol americano, el ya mencionado Montana rodeado por tres defensas de los vaqueros lanza un increíble pase que atrapó Dwight Clark con las yemas de los dedos en la zona de anotación, sellando así una victoria que a la postre los llevó a disputar el Super Bowl XVI, el primero de los 5 títulos de la NFL que ostentan a la fecha.
Aunque también hay Las Atrapadas II y III (en 1998 y 2012 respectivamente) igual de emocionantes pero menos trascendentales ya que San Francisco perdió sus partidos siguientes quedando así fuera de los playoffs durante esas temporadas.
Por mi parte, atesoro al Candlestick en un llavero que muestra el logo del equipo en su parte frontal...
pero que en su anverso muestra en relieve la imponente figura del estadio:
A partir de la próxima temporada, los 49's tendrán un nuevo estadio que seguramente será mas moderno y funcional, pero dudo que llegue a tener memorias tan grandes como las del viejo Candlestick. Espero equivocarme.
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