Sirva el presente pós para dejar constancia de la banalidad que rodea actualmente a la escena musical en su vertiente más vistosa y comercial (o mainstream). Resulta que desde hace muchos años no veo ni me interesan las entregas de premios a "lo mejor" o más destacado en lo que a la industria del entretenimiento se refiere, llámese oscares, globos de oro o grammys ya que considero que han dejado mucho que desear, por lo que viene siendo una sorpresa para mi el día de hoy que mi banda preferida de todos los tiempos, Iron Maiden, fueron "reconocidos" con un Grammy a Mejor Interpretación en el apartado de Metal por su canción El Dorado de su última producción The Final Frontier (2010).
Sin embargo, y a diferencia de muchos "artistas" que aprovechan estos eventos para dar a conocer su material más reciente o simplemente a satisfacer sus ridículas necesidades de atención por medio de fastuosas y llamativas entradas...
...los Maiden únicamente publican una pequeña nota en su sitio oficial sin darle mayor relevancia de la que el acontecimiento merece. No hubo siquiera un video de agradecimiento ya que la banda se encuentra del otro lado del mundo en plena gira internacional la cual el próximo mes de marzo llegará a nuestro país a bordo de su Boeing 757 llamado Ed Force One:
Hace más de veinte años que escucho la música de esta banda mientras que por la alfombra de los Grammy han desfilado una innumerable cantidad de artistas cuyos nombres se han perdido en la noche de los tiempos, por lo que me pregunto ¿en qué radica el verdadero éxito? ¿en 15 minutos de fama? ¿o en llevar más de 30 años haciendo lo que verdaderamente te gusta sin compromisos de ningún tipo?
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