miércoles, 9 de diciembre de 2009

Una Tarde en el A. I. G. T.

Antes de comenzar el pós, es necesario aclarar que no es la primera vez que me encuentro varado en el Aeropuerto Internacional de la Gran Tenochtitlán. La particularidad del caso residió en que fuerzas ajenas a mi voluntad impidieron que abordara el vuelo que tenía en conexión ocasionando mi restraso por varias horas.

Sucedió que debido a situaciónes de tráfico aereo (como después me explicaron, o al menos eso me dijeron), al avión que me debia dejar en la terminal no le fué permitido aterrizar hasta casi una hora después de lo programado lo que ocasionó la demora. Luego los infelices de la aerolínea me salieron con que como no fué un retraso por parte de la empresa, sino ocasionado por causas externas, no me podian pagar la estancia (Sucede que si el retraso es por causa de la empresa y si la próxima salida es hasta el día siguiente, la empresa debe de pagar la estancia del cliente en la ciudad en que se encuentre) y por lo tanto yo debía de llegar ese mismo día a mi destino, de lo contrario pagaría los gastos de mi bolsillo. Así las cosas, me encontré con que el siguiente vuelo era el nocturno y pos no quedó otra que tomar ese y quedarme ante la perspectiva de esperar por seis horas.

Pos después del entripado porque queria llegar temprano a mi destino ya que llevaba a cuestas una resaca espantosa resultado de una "reunión de trabajo" que se prolongó hasta altas horas de la noche anterior, me dirigí a la ya famosa exposición del piezas prehispánicas que ofrece en INAH en la Terminal 2, siendo esto lo que considero como lo más destacado:


Este medio Sol me gustó, con la imagen de la Muerte en medio...


Esta figura está descrita como "Chaman: personificación en escultura hueca con el tocado típico y pectoral de caparazónde tortuga capturado en ritual psicotrópico", o sea que se las estaba tronando..


Un pequeño Atlante como los famosos Tuleños, sin albur...


Mundialmente famosa cabeza Olmeca, considerada como la Madre de las Civilizaciones de América, o sea la que inició todo el relajo...


Esta figura es la recibe al visitante con los brazos abiertos, bueno, no exactamente...


Esta es definitivamente mi favorita: un Cuauhxicalli (o sea un altar zoomorfo con una oquedad en el lomo en la cual se depositaban los corazones extraídos durante las ceremonias de sacrificios aztecas) en forma de jaguar amenzante...


Justo saliendo de la exposición se encuentra esta escultura de un ángel que realmente llama la atención: En medio del ajetreo propio del aeropuerto, pareciera que espera su turno para levantar el vuelo...


Y hablando de levantar el vuelo, no pude resistir poner una imagen de otra visita que habia realizado al A. I. G. T. en la que capté una aeronave dirigiéndose a la pista de salida. En esa ocasión me regañaron por tomar fotos de las pistas pero tan me valió que va de nuevo...


Y como ya se acercan las fechas navideñas, pos ya pusieron el obligado arbol. Pero en esta ocasión lo patrocina una horrenda compañía telefónica. Por eso mejor pongo el del año pasado sin manchas corporativas que lo arruinen...

Además de lo antes mostrado, el vaivén de los pasajeros, las librerias de Conaculta, el constante despeje y llegada de las aeronaves, así como el pleito entre una azafata y un pasajero una vez hube abordado por fin mi vuelo, es difícil aburrirse en el A. I. G. T. Por cierto que el pleito antes mencionado es tema de otro pós...

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Ian McEwan - Expiación

"Sabía lo que exigían de ella. No una simple carta, sino una nueva crónica, una expiación, y estaba preparada para redactarla."...